Se trata de una planta cuyo origen se sitúa en Europa y Asia occidental, conocido desde hace muchos años. Su nombre se asoció a "ajo de oriente" y era empleado para guisos de cocina y para medicina. Sobre la Edad Media se extendió su cultivo en Europa y de ahí al resto del mundo.

                  Es una verdura empleada por cocineros de reconocido prestigio para todo tipo de guisos, sopas y cocidos; utilizado también en ensaladas. La parte comestible de la planta son las hojas y el bulbo. El componente principal de los puerros es el agua (90%) por lo que supone un alimento con propiedades diuréticas gracias a su contenido en potasio y a la pobreza en sodio. El consumo de este vegetal puede contribuir a una reducción del coleterol y los triglicéridos.

                     El puerro consta de tres partes bien diferenciadas; hojas longas y lanceoladas, bulbo alargado, blanco y brillante; y numerosas raíces pequeñas en la base del bulbo. El conjunto del puerro tiene aproximadamente unos 50 cm de altura, con de 2 a 5 cm de grosor.

                     Se trata de un cultivo mimado desde el transplante, realizado en tierras cuidadosamente labradas; en los meses de invierno, favoreciendo desde el principio un correcto desarrollo. Se planifica el cuidado del cultivo obteniendo así puerros vigorosos que cumplen las espectativas de nuestros clientes.